¿Por qué darle Vitamina C a tu Hijo?

La salud y el bienestar de nuestros hijos son una de las principales preocupaciones como padres, entre los muchos nutrientes esenciales para el organismo, la vitamina C ocupa un lugar destacado debido a sus numerosos beneficios para los niños.

Beneficios

La vitamina C, también conocida como ácido ascórbico, desempeña un papel vital en el fortalecimiento del sistema inmunológico de los niños. Contribuye a la producción y funcionamiento adecuado de las células inmunitarias, lo que ayuda a prevenir y combatir infecciones y enfermedades comunes como los resfriados y la gripe.

Además, esta vitamina juega un papel crucial en la absorción de hierro de los alimentos, lo que es esencial para el desarrollo adecuado de los glóbulos rojos y el transporte de oxígeno por todo el cuerpo. Esto es especialmente importante durante la etapa de crecimiento, cuando los niños necesitan una buena cantidad de hierro para mantener altos niveles de energía.

Otro beneficio esencial es su contribución al desarrollo óseo. Ayuda en la formación de colágeno, una proteína esencial para la estructura y fortaleza de los huesos. Asimismo, el colágeno es responsable de mantener la salud de las articulaciones y los tejidos conectivos.

La vitamina C también es conocida por su papel en la salud de la piel. Actúa como un poderoso antioxidante que protege la piel de los daños causados por los radicales libres y los rayos ultravioleta del sol. Esto ayuda a mantener una piel sana, suave y radiante en los niños.

Fuentes Naturales de Vitamina C

Afortunadamente, esta vitamina se encuentra abundantemente en una variedad de alimentos deliciosos. Las frutas cítricas como naranjas, mandarinas, fresas y kiwis son excelentes fuentes de esta vitamina. Además, las verduras como el brócoli, los pimientos y las espinacas también son ricas en vitamina C.

Recomendaciones Diarias para Niños

Las necesidades de vitamina C varían según la edad de los niños. Para los niños de 1 a 3 años, se recomienda una ingesta diaria de aproximadamente 15 miligramos. Para los niños de 4 a 8 años, la cantidad aumenta a 25 miligramos, y para los niños de 9 a 13 años, se sugiere una dosis diaria de 45 miligramos, con estas  dosis reforzaras su sistema inmunológico en este regreso a clases. Es importante destacar que estos valores pueden variar según las necesidades individuales y el estado de salud del niño.

Si bien es preferible obtener la vitamina C a través de una dieta equilibrada, en ciertos casos, los suplementos pueden ser una opción. Sin embargo, antes de darle a tu hijo cualquier suplemento, es fundamental consultar con un pediatra para determinar la dosis adecuada.

¿Por qué nos ayuda?

Ahora que conocemos los beneficios de la vitamina C, es evidente por qué es crucial para el bienestar de nuestros hijos. Al proporcionarles suficiente vitamina C en su dieta diaria, podemos:

• Prevenir resfriados y enfermedades comunes, lo que les permitirá disfrutar de una infancia más saludable y activa.
• Impulsar su crecimiento y desarrollo adecuado, asegurando que alcancen su máximo potencial tanto físico como mentalmente.
• Protegerlos de infecciones y fortalecer su sistema inmunológico para que estén mejor preparados para enfrentar los desafíos del entorno.