¿Sabes qué es la fiebre?
La fiebre es cuando la temperatura corporal de un ser humano supera el rango normal de 36–37 ° centígrados. Es un signo médico común.
Otros términos para fiebre incluyen pirexia e hipertermia controlada. A medida que aumenta la temperatura corporal, la persona puede sentir frío hasta que se nivela y deja de subir.
Para erradicar este padecimiento, puedes elegir una alternativa médica con metamizol sodico para que la fiebre y sus síntomas no estén presentes en tu cuerpo.
Aprende más sobre esta enfermedad a continuación:
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Síntomas
Cuando alguien tiene fiebre, los signos y síntomas están relacionados con lo que se conoce como comportamiento de enfermedad y pueden incluir:
• La temperatura se puede medir en la boca, el recto (ano), debajo del brazo o dentro del oído.
• Sentir frío cuando nadie más lo hace
• Temblando
• Falta de apetito
• Deshidratación
• Depresión
• Hiperalgesia
• Letargo
• Problemas para concentrarse
• Somnolencia
• Transpiración
Causas
La fiebre puede ser causada por varios factores:
• Una infección, como faringitis estreptocócica, gripe , varicela o neumonía
• Algunos medicamentos
• Sobreexposición de la piel a la luz solar o quemaduras solares
• Golpe de calor, como resultado de la exposición a altas temperaturas o ejercicio extenuante prolongado
• Seshidración
• Silicosis
• Abuso de anfetaminas
• Abstinencia de alcohol
Tipos
La fiebre puede ser:
• Bajo grado, de 38.1–39 ° C
• Moderado, de 39.1–40 ° C
• Alto, de 40.1-41.1 ° C
• Hiperpirexia, por encima de 106.0 ° F o 41.1 ° C
La altura de la temperatura puede ayudar a indicar qué tipo de problema lo está causando.
Prevención
Higiene
La fiebre es comúnmente causada por infección bacteriana o viral. Las buenas prácticas de higiene ayudan a reducir el riesgo de desarrollar una infección. Esto incluye lavarse las manos antes y después de las comidas, y después de ir al baño, también comer alimentos con vitamina C que te ayudarán a elevar las defensas de tu cuerpo.
Una persona con fiebre causada por una infección debe tener el menor contacto posible con otras personas, para evitar que la infección se propague. Quien esté cuidando al paciente debe lavarse las manos regularmente con agua tibia y jabón.